Sería una formalidad, ya que se espera hasta entonces conformar una lista de unidad para todos los cargos electivos-eldiariodecatamarca.com
Este sábado, la Unión Cívica Radical celebró su convención partidaria, que inició a las 10:00 hs de la mañana, con una agenda que incluyo dos puntos claves, la autorización para conformara alianzas electorales y la definición de mecanismo para elegir candidatos.
Tras horas de intensos debates, la convección resolvió que las candidaturas del partido se definirán a través de elecciones internas, las cuales fueron previstas a realizarse el domingo 3 de agosto. La fecha deja un margen mínimo, ya que se ubica apenas cuatro días antes del cierre de plazo legal para la inscripción de frentes electorales.
En este sentido, la división interno quedó en evidencia al llevar adelante la conformación la Mesa Directiva de la Convención, por un lado, el sector denominado "radicales con peluca" integrados por los legisladores, Puente, Carrizo, Herrera y Monti; quienes propusieron al convencional Exequiel Stern como candidato a presidente del órgano. Mientras que, del otro lado, los espacios alineados a la línea Celeste, donde se encuentran, Fadel, Jalile, Arellano y Navarro y Marchioli; impulsaron la candidatura de Agustín Marchetti, quien se impuso con 60 votos frente a los 30 obtenidos por Stern.
Este resultado dejó a la Mesa Directiva sin representación de los "radicales con peluca", lo que generó un intenso cruce de acusaciones entre los bandos, al señalar el incumplimiento de lo previamente acordado, con respecto a la posibilidad de llevar adelante una representación equitativa de cada sector con tres espacios a cubrir por cada uno.
Por otro lado, si bien se aprobó formalmente la posibilidad de integrar alianzas con otras fuerzas políticas, no se alcanzó un acuerdo sobre quienes estarán autorizados para negociar en nombre de partido. Este punto, lejos de resolverse, abre una disputa dentro de la UCR y complica el escenario en una etapa clave del calendario electoral.
Desde la conducción partidaria destacaron que se cumplió con los pasos institucionales y se respeto el funcionamiento democrático interno. Sin embargo, admitieron que los tiempos son ajustados y que será fundamental definir rápidamente quienes eran los interlocutores validos para entablar negociaciones con otras fuerzas.
La falta de acuerdos plenos refleja la tensión persistente entre los distintos sectores internos del radicalismo, que ahora deberán enfrentarse en las urnas para definir su rumbo de cara a las próximas elecciones.