La morosidad de tarjetahabientes involucra a unos 300 mil, según se desprende del último informe del BCRA. El Bapro, de los más moderados, cobra 6,29% mensual.

prever una gran mora por delante.

En marzo ya el nivel de mora en tarjetas de crédito había alcanzado un récord del 4,2% y los préstamos personales llegaron al 5,6%.

Debe tenerse en cuenta al respecto, que menos del 56% de los hogares destina entre el 40% y el 60% o más de sus ingresos mensuales al pago de deudas. 

Muchos caen en “deuda circular”, refinanciando créditos, lo que impide saldar pasivos anteriores.

Esto ejerce una presión enorme sobre el ingreso disponible, ya que representa casi el 19% del presupuesto familiar promedio.

Poder adquisitivo forzado

Si bien el consumo per cápita creció apenas un 1,2% en el último año, un alarmante 91% de los hogares argentinos tiene algún tipo de deuda, gran parte de ellas contraídas en 2024.

El proceso lo facilitaron el boom de las promociones bancarias y la facilidad de pedir dinero prestado en las billeteras virtuales. 

Fueron impulsadas por la devaluación y la fuerte inflación que erosionaron el poder adquisitivo, lo que para muchas familias endeudarse dejó de ser una herramienta transitoria para convertirse en un fenómeno estructural.

Un informe de la consultora EcoGo alertó que el crédito a los hogares representaba el equivalente al 5% del Producto Bruto Interno, el doble que un año atrás, cuando equivalía al 2,3%, si bien aún está por debajo que las cifras más altas, registradas en pleno Gobierno de Mauricio Macri: en 2018 trepó al 6,2%.