La mujer que denunció a los rugbiers franceses solicitó nuevas declaraciones. En primera instancia esto fue descartado, pero hay posibilidades de apelación y de postergar un poco más el sobreseimiento.
A la escandalosa causa de los rugbiers franceses imputados por abuso sexual en Mendoza, le quedan un par de capítulo más. Mientras este viernes había posibilidades de que fueran sobreseídos, los abogados de la mujer denunciante solicitaron nuevas pruebas, y a pesar del rechazo inmediato, estiraron un poco más la definición de la investigación.
Hoy el defensor de Hugo Auradou (21) y Oscar Jégou (21), Rafael Cúneo Libarona, llegó al Polo Judicial con el objetivo de ponerle fin al caso, luego de que el fiscal Darío Nora acompañara su pedido de sobreseimiento, entendiendo que no hay pruebas para mantenerlos imputados.
Sin embargo, los querellantes Natacha Romano y Mauricio Cardello plantearon la necesidad de que dos médicos puedan declarar como testigos, en relación a la enfermedad que padecería en la sangre y en la piel la presunta víctima y que le generaría lesiones y moretones solo con el roce con otra persona. Este punto es importante, ya que al comienzo de la pesquisa se creyó que las marcas que presentaba en su cuerpo eran consecuencia de golpes y agresiones de los sospechosos en el hotel en el que estuvieron.
Sobre esto oportunamente aportaron su testimonial dos hematólogas, señalando la probabilidad de que al tener esa afección, los machucones en ella aparecerían solo con el contacto físico con alguien.
Estas declaraciones favorecieron a los acusados y ahora buscan ser rebatidas, aunque la fiscalía consideró que no es necesario profundizar la cuestión, criterio que compartió la jueza Eleonora Arenas en la audiencia de esta mañana.
El propósito del encuentro de este viernes era tratar el sobreseimiento de los rugbiers franceses, pero el pedido de la denunciante alteró los planes.
Ante el rechazo del fiscal y la magistrada sobre esta producción de nuevas pruebas, la querella tendrá la chance de apelar para que intervenga un juez de segunda instancia. Para ello cuentan con un plazo de cinco días hábiles para hacer uso del recurso, tiempo que vencería el próximo jueves.
En caso de no hacerlo, al día siguiente ya podría realizarse la nueva audiencia de sobreseimiento. Todo indicaría que habrá apelación y el proceso se estirará un poco más.
Mientras, Auradou y Jégou están en libertad en Francia, aún imputados por abuso sexual agravado por acceso carnal y por la participación de dos personas. La denuncia contra ellos fue realizada el pasado 7 de julio y los deportistas fueron detenidos un día después en Capital Federal. Estuvieron algunas semanas con prisión domiciliaria, hasta su liberación.
