Stella Maris Saracho, de 47 años, desapareció el 22 de agosto del año pasado tras un viaje que emprendió desde Ibarlucea a Rosario con el fin de depositar en un banco dinero de la comuna, un trabajo que realizaba como encargo adicional de las autoridades de esa dependencia municipal.

Su marido y padre de sus cuatro hijos presentó ese día la denuncia de su desaparición, por lo cual desde la Fiscalía de Rosario activaron un Protocolo de Búsqueda de Paradero e iniciaron las tareas para hallarla.

En ese momento prestaron declaración sus familiares y autoridades de la institución bancaria y comunal, se requirió colaboración a Gendarmería Nacional, Policía Federal y Prefectura Naval, y se solicitaron informes a migraciones, entre otras medidas.

El lunes por la tarde la mujer se presentó ante la justicia y dijo que ese día se quedó dormida en el colectivo y le robaron el dinero que le había dado la comuna, unos 60 mil pesos y cuatro cheques por un valor de 10 mil.

Asimismo, sostuvo que entró en un "estado de desesperación", por lo que decidió tomar un remís hasta la ciudad de Santa Fe y desde allí se trasladó a Formosa.

El fiscal Aníbal Vescobo, quien llevó adelante la investigación, detalló este martes que en una primera instancia la mujer vendió termos en Formosa para subsistir y luego se trasladó a Paraguay, donde una familia la albergó para el cuidado de niños.

"Según su relato, intentó comunicarse con su familia a los seis meses de su desaparición pero no pudo y le costaba volver porque temía que nadie creyera su versión, pero decidió regresar porque extrañaba mucho", explicó el fiscal, quien decidió imputar a la mujer por "defraudación a la comuna", un delito que es excarcelable.

Fuente: Minuto Uno